El desayuno con crepes estaba delicioso y fresco.

La habitación tenía un walk-in closet amplio y estaba impecablemente decorada. El desayuno, con crepes recién hechas y mermelada casera, fue un verdadero deleite. Además, la cordialidad de los anfitriones hizo que nos sintiéramos como en casa en este hermoso lugar.

totalmente recomendable

walk-in closet amplio, decoración de buen gusto, limpieza impecable

La privacidad no es la ideal, ya que los anfitriones viven aquí y tienen animales que no se mencionan en su publicidad. Mejorar la comunicación sería excelente, ya que el idioma es una barrera. ¡Tener que desayunar en la cocina puede ser incómodo!!!

Un consejo práctico es pedir el desayuno en la cocina, ya que es un ambiente acogedor que te permite conocer a otros huéspedes.

Desayuno espectacular y atención increíble

La habitación era super cómoda, con un closet gigante y hasta un mini fridge. El desayuno fue una locura, crepes recién hechas y mermelada casera que estaba de rechupete. Solo que el acceso a la piscina un poco complicado, tendría que mejorar eso. Además, el área de comedor al aire libre es muy acogedora.

Habitación amplia y muy bien decorada, con un walk-in closet perfecto para nuestras cosas. Desayuno delicioso, con crepes recién hechas. La tranquilidad del lugar se nota y hace que la estancia sea muy relajante. Aunque el acceso a la piscina podría mejorar un poco.

La habitación con vista a la piscina era muy espaciosa y estaba perfectamente equipada, destacando la limpieza y el buen gusto en la decoración. El desayuno sorprendió con opciones como crepes recién hechas y risotto, creando un inicio de día delicioso. Sin embargo, el acceso a la piscina es algo complicado, y no se puede negar que el precio es un poco elevado para lo que se ofrece. La tranquilidad del entorno es un gran punto a favor, aunque la habitación podría necesitar un poco más de atención en los detalles.

Recomendado para parejas que buscan tranquilidad

La atención de los anfitriones fue de primera, se notaba que les importa que te sientas cómodo. El ambiente del hotel era tan acogedor que me recordó a los buenos viejos tiempos, donde todo era más simple y relajado.

No fue barato pero lo que ofrecen está justificado.

La habitación con vista a la piscina era tan relajante que sentí que estaba en un spa de lujo en lugar de un alojamiento. Además, la piscina al aire libre era perfecta para disfrutar del sol, como si fuera un día de fiesta en la playa, sin arena ni olas que incomoden.

Acceso a la piscina complicado

La habitación tenía un walk-in closet amplio y estaba impecablemente decorada. El desayuno, con crepes recién hechas y mermelada casera, fue un verdadero deleite. La tranquilidad del lugar y la amabilidad de los anfitriones hicieron que nuestra estancia fuera realmente placentera.

La privacidad no fue la ideal.

La habitación era limpia y con buena decoración, y el desayuno estuvo muy sabroso. Sin embargo, la privacidad no fue la esperada, ya que los anfitriones viven en la casa y tienen mascotas. Esto podría ser un inconveniente para algunos.

Un punto a considerar es que la privacidad no es como se podría esperar, ya que los anfitriones viven en la misma casa y tienen gatos y perros, lo que no se especifica claramente. Para quienes tienen alergias o fobia a los animales, esto puede ser un inconveniente. Aunque el desayuno es bueno, la barrera del idioma se siente, ya que no hablar francés complica la comunicación.